Los grupos de la oposición, UM y PSM, denunciaron ayer la falta de «información» y «transparencia» por parte del equipo de gobierno (CDM-PP) en el proceso de privatización del suministro del agua potable. Precisamente, ayer los miembros del equipo de gobierno y de la oposición asistieron a la apertura de plicas. Asimismo, los responsables de las empresas interesadas (Gesba, Aqualia y Sorea, que se encarga de la gestión del suministro de agua potable en Can Picafort) expusieron sus ofertas.
Las empresas anunciaron que no aumentarán las tarifas vigentes durante el primer año. En estos momentos, las tarifas son progresivas y giran entorno a los 0'24 céntimos de euro y 0'97 céntimos por metro cúbico, dependiendo del consumo. El regidor Pau Mateu (PSM) fue el más crítico con esta cuestión y señaló: «Una vez haya pasado el primer año, las tarifas aumentarán un 25%».
La adjudicación se llevará a cabo por procedimiento negociado y el contrato tendrá una duración de cuatro años. Las condiciones especifican que «la ampliación, renovación y mejora de las instalaciones son de exclusiva competencia municipal, estando el concesionario obligado a participar en su financiación, total o parcialmente».
El Ajuntament ya ha subsanado la última deficiencia de la normativa urbanística de Muro relativa al cámping Platja Blava. El Consell ha realizado esta semana la proyección ortogonal en la zona del cámping. De esta manera, una pequeña franja pasará a ser área de protección territorial. El alcalde, Miquel Ramis, explicó que «se mantendrá el convenio urbanístico firmado con los propietarios del cámping, así como el mismo número de plazas, que es de 498».