El centro de acogida de menores, situado en la possessió de Son Jeroni de Muro y gestionado por el Consell de Mallorca, no reúne las mínimas condiciones de habitabilidad. Ayer, este periódico tuvo acceso a las instalaciones de este antiguo inmueble, ubicado en las afueras del pueblo, y pudo verificar las denuncias hechas públicas por parte de los sindicatos Comisiones Obreras, UGT y los trabajadores sociales del centro.
El colectivo de educadores sociales denunció el pasado jueves a Ultima Hora«la situación insostenible de vivir sin luz ni agua potable». Este centro de protección de menores funciona desde el pasado mes de mayo en Muro y, según los trabajadores, han esperado hasta ahora a denunciar estos hechos «para evitar desequilibrar a los menores».
El antiguo inmueble, propiedad del Obispado de Mallorca y gestionado por el Consell Insular, tiene tres plantas y aloja un total de siete menores en edades comprendidas entre los 13 a los 17 años procedentes de familias desestructuradas. En estos momentos, 15 educadores trabajan en Son Jeroni.
«Cuando llegamos hicimos una serie de talleres para mantener en buenas condiciones esta casa, pero cuando dejaron de invertir la possessió se ha ido deteriorando muchísimo», lamentó uno de los trabajadores de este colectivo que ha preferido mantenerse en el anonimato.