El ministro de Medio Ambiente, Jaume Matas, presentó ayer el futuro Centro de Visitantes de ses Salines para el Parque Nacional de Cabrera. La inversión prevista para este proyecto es de «15 millones de euros, cuyo plazo de ejecución será de 18 meses, momento en que este centro será una realidad», manifestó Matas en su discurso. El alcalde de ses Salines, Joan Burguera, agradeció la colaboración del Ministerio de Medio Ambiente así como la declaración del municipio como zona de influencia del Parque Nacional de Cabrera porque de esta forma «podremos acogernos a muchas subvenciones», expresó el edil.
Asimismo, Matas justificó que se trataba de «cumplir un compromiso y satisfacer una necesidad». El ministro destacó que «la construcción del centro se realiza en unos terrenos calificados como urbano y urbanizable, puesto que no sería correcto hacerlo en un espacio natural ya que el objetivo de este proyecto es la divulgación y concienciación ambiental». El Centro de Visitantes ha sido proyectado por el Organismo Autónomo de Parques Nacionales. Se trata de un edificio tronconónico de tres plantas: sótano, baja y primera, rodeado de volúmenes de piedra inspirado en la arquitectura tradicional de la costa balear.
El edificio será la reproducción de un antiguo talayot y tendrá más de 2.700 metros cuadrados de superficie construida, la mayor parte subterránea: 1.929 m2. El recinto albergará, entre otras instalaciones, un sector submarino, un área de interpretación del medio terrestre y una amplia sala de proyecciones en la que el protagonista será un audiovisual que explicará los fundamentos de la Red de Parques nacionales.
El centro contará con 14 acuarios. La entrada al centro comienza en una rampa que pasa por debajo del estanque mientras que sobre la cabeza del visitantes hay un rompeolas que le sugiere que se está sumergiendo bajo el agua, después se puede observar la escenografía de una gruta submarina que acaba en una cueva. En la zona exterior habrá un espacio ajardinado con estanques que simulan el mar, en donde se van a instalar maquetas que representan la fauna marina del Mediterráneo, especialmente cetáceos y aves.