Los funcionarios de los juzgados de Inca reclaman más medidas de seguridad en el edificio judicial y sus alrededores y una mejora de sus condiciones laborales en lo que se refiere a recursos humanos y técnicos.
Los trabajadores judiciales protestan por el hecho de que durante las tardes, entre las 17.00 y las 20.00 horas, «no hay ningún tipo de vigilancia en el edificio». «Permanecemos en nuestros puestos de trabajo sin protección alguna», afirma Salvador Riera, uno de sus representantes.
Asimismo, los funcionarios de los juzgados de Inca consideran que sus condiciones laborales son «pésimas» y que la falta de recursos humanos y técnicos entorpece y retrasa su labor.