El 23 de noviembre los casi 3.000 habitantes con residencia fija en Cala Millor (Son Servera) contarán, por fin, con el ansiado centro de salud y el edificio polivalente cuya construcción se ha retrasado debido a que la primera empresa adjudicataria de la obra en 1998, abandonó el proyecto.
Por este motivo, el proyecto inicial tasado en 450.000 euros fue modificado y, finalmente, costará casi el doble, 840.000 euros. La diferencia de casi 400.000 euros será pagada por las conselleries de Salud y Benestar Social del Govern balear, mientras que el Ajuntament de Son Severa sufragará finalmente la cantidad de 225.000 euros.
El centro cívico ha sido construido en una parcela de 1.240 metros cuadrados y forma un complejo de dos plantas. En la planta baja, estarán las instalaciones sanitarias con dos médicos, una enfermera, un auxiliar administrativo y un pediatra y el centro de la tercera edad de Cala Millor. En el primer piso, estará la biblioteca, un centro juvenil y demás dependencias municipales.
El edil Eduard Servera, ex regidor del PSOE en la oposición, criticó que el proyecto final no cuente con algunos espacios para desarrollar actividades como gimnasia para embarazadas, conferencias, cursos, baile de salón o exposiciones.