Sólo han pasado tres meses desde la drástica decisión del alcalde de Manacor de quitar las melias de na Camel·la, hecho que motivó la ruptura del equipo de gobierno, con el abandono del PSM y las quejas desde diferentes ámbitos. Ahora ya es historia y na Camel·la cobra de nuevo protagonismo, ya que con la remodelación cambia su fisonomía ofreciendo un aspecto diferente.
Como siempre, hay opiniones para todos los gustos. Para unos, la remodelación le ha hecho un favor; para otros, el encanto que un día se perdió no volverá a recobrarse nunca más.
Las obras de remodelación de na Camel·la están prácticamente acabadas. Sólo faltan una serie de accesos, plantar los lledoners e instalar el mobiliario urbano. También están a pleno rendimiento los 175 aparcamientos subterráneos. Actualmente, son cinco mil los vehículos que entran cada mes en los aparcamientos de la plaza Jordi Caldentey.