Los vecinos de Porreres verán cumplida una antigua aspiración: la compra por parte de las Administraciones Públicas del emblemático Principal Cinema. El Ajuntament ha llegado a un acuerdo de compra con la familia Palmer, propietaria del edificio, por un total de 480.810 euros (unos 80 millones de pesetas), que serán pagados por el mismo Ajuntament y el área de Presidència del Consell de Mallorca.
Construido en la postguerra a imitación de la Sala Augusta de Palma, el Principal Cinema conserva su estética inicial gracias a los esfuerzos de su propietario. La sala de proyecciones tuvo que cerrar en la decadencia de los cines que se vivió en Mallorca en la década de los 70 y 80. Años después, sus pasillos fueron convertidos en un bar de copas hasta que hace unos diez años el Ajuntament los compró y se ha utilizado como auditorio municipal.
Ahora se han adquirido los 1.900 metros cuadrados que ocupan las instalaciones propias del cine y un almacén anexo con el objetivo de convertirlos en un espacio cultural multiusos. «Evidentemente se tendrá que hacer algo. La idea es hacer un proyecto global de rehabilitación, pero esto tendrá que ser en la próxima legislatura, ahora ya estamos contentos con este logro», explica el alcalde, Joan Sastre, quien añade que tal vez el cine pueda albergar, a parte de las actividades propias del auditorio, la escuela de música o un centro de formación, entre otras posibilidades.