Las antiguas reivindicaciones de los padres del núcleo de Calonge se han visto finalmente materializadas y después de varios años de lucha, sus hijos podrán ser escolarizados en el mismo pueblo donde también viven. La Conselleria d'Educació se ha comprometido a construir una escuela de nueva planta en Calonge, destinada a los escolares de educación infantil y primaria.
Mientras se llevan a cabo las obras, los niños tendrán que conformarse, este año, con asistir a clase en un aula habilitada del antiguo salón parroquial de la iglesia del pueblo. Una docena de chicos de tres años comenzarán el curso en este espacio provisional, pero en un año podrían trasladarse a la nueva escuela, ubicada junto a las instalaciones deportivas.
Ayer viernes, última jornada antes del inicio de las clases, las dos profesoras de la escuela provisional estaban ultimando los preparativos. «Es positivo que los niños no estén obligados a trasladarse a otros centros fuera de Calonge», comentó una maestra. El alcalde de Calonge, Antoni Matas, recordó que pronto se cederá el solar a la Conselleria.