El presidente de la Comunitat Autònoma, Francesc Antich; la consellera de Medi Ambient, Margalida Rosselló, y el director general de Recursos Hidrícs, Antoni Rodríguez, acompañados por los alcaldes de Sóller y Fornalutx, Ramón Socias y Salvador Sastre, respectivamente, visitaron ayer la fuente de sa Costera (Escorca) ante el inicio de las obras del trasvase de agua a la bahía de Palma el próximo año. El Govern ya ha aprobado la ocupación urgente de los terrenos afectados por la expropiación, aunque el Ministerio de Medio Ambiente, organismo que financia las obras, aún no tiene constancia oficial de ello, según fuentes de este departamento.
Antich destacó que «el Govern ya ha hecho toda la parte del proyecto que le corresponde y ahora sólo cabe esperar que el Ministerio de Medio Ambiente (que preside Jaume Matas) sea sensible y se esmere en comenzar las obras con la misma celeridad que lo hizo con la regeneración de las playas». Tanto el presidente como la consellera aseguraron que si una vez que Fomento presente el proyecto (uno de estos días) no se acelera la tramitación se puede perder la única oportunidad de conseguir un barco para instalar la tubería submarina la próxima primavera.
Los asistentes a la visita pudieron comprobar una vez más la importante cantidad de agua de buena calidad que va a parar al mar. En la actualidad, la fuente vierte al mar 234 litros de agua por segundo, es decir, casi 20 millones de litros cada día, tres veces más de lo que produce la desaladora de Palma.
El proyecto de aprovechamiento de los recursos hidráulicos de la Serra de Tramuntana prevé la reconducción del agua de sa Costera hasta el Port de Sóller a través de una conducción submarina de nueve kilómetros. A partir de ahí, el agua será impulsada por una tubería subterránea que llegará al túnel de Sóller y, posteriormente, a Son Pacs, en Palma. El caudal podrá ser aprovechado para recargar los acuíferos de s'Estremera, la principal aportación natural de agua. El proyecto incluye el aprovechamiento del agua sobrante de los torrentes del municipio de Sóller. En total, habrá 30 kilómetros de tubería.
Para la ejecución del proyecto ha sido necesaria la expropiación de los terrenos de la antigua empresa del GAS SA, la central eléctrica de Sóller situada en sa Costera, y terrenos rurales. También en el Port de Sóller, el 5 de septiembre se procederá a la ocupación de 11.000 metros cuadrados de suelo rústico para poder construir los depósitos reguladores. La tramitación administrativa finalizará este año y las obras comenzarán en 2003. El plazo de ejecución del proyecto es de 19 meses. El coste del proyectos es de 55.970.540 de euros y la obra será financiada por el Ministerio de Medio Ambiente.