La Demarcación de Costas de Balears, dependiente del Ministerio de Medio Ambiente, se verá obligada a pagar alrededor de 180.000 euros (unos 30 millones de pesetas) en concepto de tasas e impuestos por la licencia de obras del paseo marítimo peatonal de la Colònia de Sant Jordi. Así lo ha asegurado el Ministerio de Administraciones Públicas (MAP).
Costas había pedido la exención del pago amparándose en la Ley de Costas y el Ajuntament de ses Salines lo llevo a pleno, punto que quedó sobre la mesa porque no estaba claro si jurídicamente era posible. Para esclarecer si tenia que pagar o no la licencia, el Consistorio solicitó un informe al MAP. Ayer se recibió el informe que concluye que Costas debe estar sujeto al impuesto de construcción. El alcalde de ses Salines, Joan Burguera (PP), manifestó: «Nosotros no queremos regalar nada y si la ley no permite eximir a nadie de las tasas entonces Costas tendrá que pagar».
El problema surgió por la contradicción entre dos leyes. El artículo 113.3 de la Ley de Costas 29/1988 dice que la «Administración del Estado podrá quedar exenta del abono de tasa para la expedición de licencias que sean exigibles con arreglo a la legislación urbanística». En cambio, en la ley posterior reguladora de las haciendas locales quedan suprimidos todos los beneficios fiscales. «Lo que queremos por encima de todo es tener el paseo y si además esto supone unos ingresos legales pues mucho mejor. Si la ley dice que tienen que pagar nosotros no diremos lo contrario. No podemos erigirnos en abogados ni tampoco en jueces», añadía el alcalde.
Por su parte, desde la Demarcación de Costas reconocieron que desde el Ajuntament les habían comunicado el informe del MAP pero que todavía no lo habían visto: «No vamos a hacer declaraciones de ningún tipo hasta que no conozcamos el contenido de la resolución. Luego ya decidiremos si se paga».