El Consell Insular ha puesto en marcha un centro de acogida de menores en las casas de la antigua possessió de Son Jeroni, dentro del término municipal de Muro. Esta es la ubicación provisional que se ha dado a un servicio polémico que tuvo que trasladarse desde Son Espanyolet y es Rafal, en Palma, a Bunyola, por la oposición de los vecinos.
El Consell, después de llegar a un acuerdo con el Ajuntament de Muro, ha alquilado este gran inmueble a una entidad alemana que lo había gestionado, primero, como geriátrico y, después, como un centro para marginados. A pesar de que el centro funciona con normalidad desde hace varias semanas, las casas no cuentan con todos los servicios necesarios ni están adaptadas a las necesidades de los jóvenes. Por este motivo, han comenzado unas pequeñas obras y se ha solicitado una línea eléctrica en las casas que funcionaban con un generador y unos paneles solares.
El jefe de servicio de atención a los menores del Consell, Manuel Gordó, ha explicado que este tipo de centro se tiene que ubicar en algún lugar y la sociedad se tiene que sensibilizar y asumir que hay que dar una salida a estos jóvenes para hace posible su reinserción en la sociedad. En este inmueble, se dará una asistencia continuada las 24 horas del día con un máximo de 15 jóvenes de entre 14 y 17 años.