Un plan de gestión redactado por el Consell de Mallorca determinará los usos de la finca pública de Son Amer, ubicada en el término municipal de Escorca. Entre 2003 y 2008, el Departament de Medi Ambient i Natura del organismo insular prevé una inversión de 212.400 euros, además de la que lleve a cabo el área de Promoció i Ocupació. El proyecto más importante es la rehabilitación de las casas y su reconversión en refugio para integrarlo en la «ruta de pedra en sec». Las obras ya se han iniciado y se realizarán a través de escuelas taller.
Además, el plan de uso y gestión prevé la recuperación de caminos y senderos para determinar itinerarios de excursionistas, así como la restauración de todos los elementos etnológicos (molinos, barracas...). La finca de Son Amer se compró en 1999 y la actividad de la finca llevaba paralizada años. La mayor parte de estas construcciones y caminos no están en buenas condiciones para su uso y necesitan una importante intervención.
«Es necesario tener las infraestructuras adecuadas para hacer más público el uso de Son Amer», aseguraron fuentes del área de Medi Ambient que dirige Miquel Angel Borràs. El plan de uso y gestión también incluye la creación de un área recreativa y planificar la gestión de las zonas forestales y agrícolas de cara a su recuperación. Con Son Amer, ya son cuatro las fincas del Consell que tienen su plan de uso y gestión (sa Dragonera, Son Fortuny y Tossals Verds). Esta finca de Escorca, de 103 hectáreas, es la única que no está conveniada con el Govern y es gestionada exclusivamente por el Consell.
Camino de acceso a Tossals Verds
El Consell iniciará en agosto al arreglo del camino de acceso a la
finca de Tossals Verds, cuyo firme quedó muy dañado por el temporal
del pasado mes de noviembre. La actuación consistirá en la
aplicación de un doble tratamiento asfáltico no agresivo, con una
capa de gravilla color natural para integrarlo en el entorno. La
obra tendrá un presupuesto de 27.600 euros y comenzará a ejecutarse
el 26 del próximo mes. El camino tiene una longitud de 1'5
kilómetros desde la entrada de la finca hasta el refugio y aunque
no es transitada por vehículos privados (salvo los de la
administración), la mejora de la vía es muy necesaria, ya que se
mezclan trozos de hormigón y de asfalto. La obra quedará terminada
en el plazo de dos semanas.