La carretera de Inca, a su paso por Binissalem, se estrechará con el fin de reducir la velocidad de los coches que circulan por la vía. Las obras de mejora de este tramo de carretera, también conocido como calle Conqueridor, se iniciarán este verano.
Básicamente, los trabajos consistirán en crear, arreglar y ensanchar aceras; instalar bancos; repintar las marcar viales y colocar un semáforo con botón para facilitar a los peatones el cruce de la vía desde la carretera de Biniali.
El alcalde Miquel Nadal (PSOE) explicó que esta actuación responde a que las compensaciones de la ejecución de la primera fase del polígono era invertir unos 180.300 euros (30 millones de pesetas) en «lavar la cara» al acceso al pueblo desde la carretera.
Nadal dijo que al conocer este proyecto, el departamento de carreteras del Consell de Mallorca propuso introducir una serie de cambios, como ensanchar las aceras y repintar las marcas viales para aumentar la seguridad en la vía, «donde muchos coches circulan a gran velocidad».
Por otra parte, este «lavado de cara» de la carretera centrará su actuación en la zona de sa Vinya y el cuartel de la Guardia Civil, donde hay una acequia al descubierto que desaparecerá.