La zona de la playa del Port de Pollença ubicada frente al pinar de Llenaire presenta un mal estado para los bañistas debido a que no se retira la gran cantidad de restos de algas acumulados en las rocas.
Vecinos de la zona han expresado su malestar por el hecho de que
esta parte de la playa no cuente con la misma atención que otros
lugares de la bahía.
La playa de Llenaire es desde hace muchos años la zona de recreo y
baño para muchos residentes en el Moll, que buscan este lugar donde
predominan las rocas sobre la arena.
Pero las grandes cantidades de algas acumuladas en las rocas, que esté año aún son mayores por los temporales registrados el pasado mes de noviembre, provocan ahora que la zona se esté convirtiendo en un núcleo de suciedad y mal olor, en el que se acumula la basura e, incluso, restos de embarcaciones abandonadas.
El Ajuntament de Pollença es el encargado del mantenimiento y limpieza de las playas. Su alcaldesa, Francesca Ramón, explicó ayer que la decisión de no retirar las algas se debe a «un informe del área de Medio Ambiente de nuestro Ajuntament que recomienda que se dejen acumular allí porque de esta forma se frena la pérdida de arena en la playa y, además, se protege una serie de pinos jóvenes que se han plantado recientemente en la zona posterior».
La alcaldesa asegura que se realiza un seguimiento del estado de las algas. «Si se producen malos olores, las retiraremos pero hasta al momento no tenemos constancia de que sea así», aseguró.