Los accionistas de la compañía concesionaria del túnel de Sóller aprobaron la semana pasada las cuentas correspondientes al año pasado. Los beneficios, según explicó Jordi Ferrer, gerente de la concesionaria, fueron de unos 8.000 euros (1'3 millones de pesetas). «La explotación es muy ajustada y el resultado es prácticamente cero», indicó Ferrer, quien agregó que pasarán varios ejercicios hasta que se pueda hablar de beneficios.
La compañía concesionaria Túnel de Sóller mantiene el recurso contencioso-administrativo contra el Govern para exigir compensaciones y conseguir el equilibrio económico. El recurso fue interpuesto en 1998 y, según Ferrer, aún queda por lo menos un año hasta que se resuelva el litigio.
El Govern reconoce que debe hacerse cargo de unas obras añadidas al proyecto en el momento de la construcción del túnel de Sóller, pero tampoco ha hecho efectiva la cantidad correspondiente.
Jordi Ferrer indica que el número de vehículos que atraviesan diariamente el túnel (en torno a las 6.000) está por encima del previsto, pero los ingresos no debido al «factor fraude» en las tarjetas de residente. El túnel ha planteado el descuento en los precios del peaje por el uso no por la residencia. «Este sistema no afectaría a los residentes porque tendrían descuento y beneficiará a usuarios de otros municipios», explica el gerente del túnel. Esta fórmula no ha convenido al Govern.
Finalmente, Ferrer advierte que la promesa del PSOE de la gratuidad del peaje para los residentes no será fácil de aplicar. «Deberá haber un mayor control para evitar el fraude», expone.