La alcaldesa de Santa Maria, Rosa Vich (PSM), verá incrementada la asignación que recibe actualmente por su cargo municipal en más de un 500 por ciento. Los nuevos presupuestos municipales para este año prevén que la alcaldesa pase a cobrar unos 1.600 euros mensuales (266.000 pesetas) cuando hasta ahora percibía tan solo 300 euros (50.000 pesetas), una cantidad heredada de cuando Mateu Morro ocupaba la Alcaldía.
A pesar de ello, Vich no tendrá dedicación exclusiva ya que mantiene su puesto de trabajo como profesora en la escuela pública si bien con una jornada reducida. El PP aprovechó el pleno de las cuentas para echar en cara al PSM lo que considera un incremento «abusivo y desorbitado» de la nómina. El portavoz popular, Antoni Cañellas, criticó que este incremento vaya acompañado del mantenimiento de otra regidora con dedicación exclusiva cobrando 1.800 euros mensuales (300.000 pesetas) y un edil con dedicación parcial y una indemnización de 900 euros (150.000 pesetas).
Cañellas considera que «los políticos deben estar bien pagados, pero demostrar rendimiento. No puede ser que uno esté en el Ajuntament para ganar dinero antes que para hacer un bien al pueblo». Desde el equipo de gobierno, el regidor de Hacienda, Joan Serra, mantiene que el incremento de sueldo viene justificado por las horas que dedica Vich al Ajuntament y por la pérdida económica que le ha ocasionado pedir reducción de jornada en su trabajo.
El pleno aprobó, con los votos a favor de PSM y UM, los presupuestos que suben a 3'2 millones de euros. Las cuentas prevén pocas inversiones como la dotación de pluviales de la calle Ramon Llull y el acondicionamiento de algunas calles (161.000), las pluviales de la calle Joan Mesquida (24.900) y la mejora del local de la tercera edad (90.000).