El Govern presentó ayer un recurso contencioso administrativo contra la decisión del Ministerio de Medio Ambiente de extraer arena de un yacimiento marino en Banyalbufar y su posterior vertido en Can Picafort. El Ejecutivo balear, que dio cuenta de su actuación tras el habitual Consell de Govern de los viernes, espera que los jueces suspendan las obras que realiza el Ministerio de Medio Ambiente.
El portavoz del Govern, Antoni Garcías, señaló que la actuación judicial del gabinete balear pretende que Demarcación de Costas concluya las extracciones de arena mientras no haya un proyecto definido y la aprobación administrativa de la propuesta por parte de la Conselleria de Medi Ambient.
«Estamos cansados de estas deslealtades y trampas por parte del Ministerio de Medio Ambiente», cuestionó el portavoz, quien se mostró dispuesto a buscar con el departamento que dirige Jaume Matas una mejor solución para la regeneración de las playas de la costa norte de Mallorca.
El Govern considera «una barbaridad» el volumen de arena que se quiere extraer de Banyalbufar. «Lo que el Govern quiere sacar de Banyalbufar serviría para cubrir de arena todos los edificios de hasta cuatro alturas del casco antiguo de Palma», comparó Garcías, quien también aseveró que un camión necesitaría 900 años para transportar toda la arena que se extraerá de Banyalbufar».