La Asociación de Propietarios de la Urbanización de Son Verí Nou presentó ayer un recurso de alzada contra el acuerdo del Consell de Mallorca que autoriza la construcción de un colegio privado en un solar municipal de 10.000 metros cuadrados, incrementando el porcentaje de edificabilidad al 100% y la ocupación, al 70%. Bartomeu Salom, presidente del colectivo vecinal, ha explicado a este diario que inicialmente existía un plan parcial que permitía un 25% de edificabilidad y un 35% de ocupación.
«El proyecto preveía la construcción de un colegio para 300 alumnos que cubría las necesidades de guardería y de Enseñanza Primaria de la urbanización», indicó Salom. Sin embargo, los propietarios consideran que la modificación del proyecto para crear un colegio de 10.000 metros cuadrados con 77 aulas para 25 ó 35 alumnos cada una es «una barbaridad».
La oposición al colegio privado se puso de manifiesto en la asamblea celebrada la semana pasada. De los 80 asistentes, sólo dos personas votaron en contra, los principales accionistas del Club Social que sería adquirido también por los promotores madrileños del colegio. El resto apoyó la presentación del recurso de alzada contra el Consell y si no prospera, recurrir a la vía contencioso administrativo para paralizar la obra. A juicio de los vecinos de Son Verí Nou, la presión demográfica de casi 2.000 personas más con la construcción del centro docente supondrá el incremento de ruidos y de tráfico en una urbanización de 550 viviendas y 1.500 habitantes.
En la reunión vecinal se puso de manifiesto que todas las urbanizaciones del municipio de Llucmajor ya tienen una zona docente, por lo no está justificado un colegio que albergue a más de 1.500 alumnos, según aseguró Gabriel Caffaro, administración de la asociación e integrante de la junta de propietarios. Según el proyecto al que han tenido acceso los propietarios, el Ajuntament cederá por un periodo de 50 años el solar a los promotores de Madrid. Una vez transcurrido ese periodo revertiría a la administración.