La inauguración de las nuevas dependencias de Deixalles en Sóller se convirtió ayer en un acto de reconocimiento a todos aquéllos que han hecho posible la habilitación de un recinto en los terrenos de la vieja depuradora destinado a la reinserción de personas con desarraigo familiar, social y laboral y la realización de trabajos de recuperación y reciclaje de residuos urbanos. Las nuevas instalaciones tienen dos edificios de oficinas, exposición y venta, taller y almacén. Uno de los edificios ha sido construido junto al terraplén de la carretera del Port y el otro ha sido habilitado en el interior de una anterior construcción de la depuradora y en ellos trabajan nueve personas contratadas y catorce en proceso de inserción.
En sus parlamentos, Miquel Puigrós, gerente de Deixalles-Sóller, y Andreu Miró, de la Fundació Deixalles, agradecieron la labor de la familia Pons, el Ferrocarril de Sóller y Margalida Magraner (Grupo Serra) por impulsar y facilitar la puesta en marcha de la delegación sollerica de Deixalles, en mayo de 1994, con el apoyo del Ajuntament de Sóller y del Govern. El presiente del Govern, Francesc Antich, animó a la sociedad a «implicarse en proyectos solidarios».
El traslado de la antigua sede, en la fábrica de jabones Can Puig, a las nuevas dependencias ha supuesto una inversión de 160 millones de pesetas (961.619 euros), de los que algo más de la mitad (82 millones de pesetas) han sido aportados por el Govern.
La Fundació Deixalles, creada en 1987 por Cáritas Diocesana y PIMEM, realiza una doble tarea social y terapéutica y de recuperación de residuos sólidos urbanos. Así, personas con problemas de exclusión social trabajan en talleres de restauración y fabricación de muebles, reparación de electrodomésticos y selección de ropa, papel, latas y botellas para su reciclaje. Desde su fundación, Deixalles ha formado 47 personas y ha colocado a 225 trabajadores en empresas. También ha constituido cuatro empresas: Escapats SL (mensajería en bicicleta), Llar i Ambient de ses Illes SL (bioconstrucción), Quercus (restauración de muebles) y Ecollauna Balear SL (recogida de latas).