Los grupos de la oposición del Ajuntament de Montuïri, PSM y PSOE, han denunciado la «falta de rigor contable» del PP, deficiencia que han calificado de «impresentable». En este sentido, nacionalistas y socialistas han razonado que la deuda económica contraída por el Consistorio con GESA «evidencía la pésima gestión de los conservadores». No obstante, el portavoz del PSM, Mateu Ginard, apuntó: «Estamos dispuestos a colaborar con los gobernantes para paliar y mejorar la situación».
La compañía GESA intentó anteayer cortar el suministro eléctrico a la Casa Consistorial, alegando morosidad. Sin embargo, el alcalde, Gabriel Matas, y un policía local impidieron a una brigada de la empresa acceder al contador. Tomeu Servera, del PSOE, reconoció ayer que «a nivel de usuarios, los vecinos consideran que el servicio de GESA es un desastre. Hay una falta de seriedad muy grave. Cualquier avería que se produzca por la zona afecta al pueblo. Pero sí es verdad que el Ajuntament, desde hace unos seis años, arrastra deudas, y su sistema habitual de pago provoca la acumulación de retrasos». Servera, añadió: «Pero para llegar al extremo de que GESA vaya directamente al contador para cortar el suministro quiere decir que se debe una cantidad importante».
PSM y PSOE advirtieron que el Consistorio lleva acumulada una deuda a proveedores (entre éstos, GESA), de cerca de 80 millones de pesetas. Asimismo, se sobrepasan los cien millones en cuanto a entidades bancarias. La oposición defiende que «tendrían que hacer (en alusión al PP) un criterio de priorización. Se da un exceso de importancia a temas de imagen, y se dejan a un margen las primeras necesidades, las intervenciones básicas. Económicamente, la situación es muy complicada; hay muchas facturas que no se pagan y, en consecuencia, la gestión no es buena. Se tendrían que poner ya las pilas».
El alcalde exige una rectificación a GESA
Para esta mañana está prevista una reunión entre directivos de GESA
y el alcalde de Montuïri, Gabriel Matas. El primer edil anunció
ayer que exigirá a la empresa «una rectificación pública y
depuración de responsabilidades». Matas apuntó que la deuda global
contraída es de «unos cuatro millones de pesetas», y criticó que
«hay ayuntamientos de la Isla que deben mucho más dinero que el
nuestro». Por su parte, desde GESA se ratificaron en su
posicionamiento, reflejado ayer en este periódico, y anunciaron que
en la entrevista de hoy se repasará el convenio firmado por las dos
partes en agosto. En otro orden de asuntos, informaron que la deuda
contraída por los ayuntamientos de Balears alcanza en estos
momentos los 800 millones, el doble teniendo en cuenta todas las
Administraciones Públicas.