Un vecino de Sóller y una entidad de Palma han presentado esta semana dos nuevas denuncias contra la empresa de materiales de construcción Suliar, que como se recordará permanece precintada por orden judicial desde el pasado mes de marzo. En este caso, las denuncias no hacen referencia a las instalaciones precintadas, situadas en sa Roca Rotja sino a actuaciones dentro del suelo rústico que se realizan en el Camí de sa Figuera y que los denunciantes atribuyen a la misma empresa.
Según el escrito presentado ante la Guardia Civil por un vecino de Sóller, «la entidad Suliar SA está realizando una construcción en el Camí de sa Figuera, en suelo rústico, concretamente dentro de un Àrea Rural de Interés Paisajístico (ARIP) y considera que esta obra «podría ser constitutiva de un delito contra el medio ambiente». El mismo denunciante asegura en su declaración que «desconoce al propietario de los terrenos», pero que «se está aplanando el terreno, eliminando los árboles; parece que se está iniciando una edificación. El ruidos y el polvo causan molestias a los vecinos». La demanda presentada ante el juzgado aún es más concreta, ya que denuncia a Suliar y a sus responsables por un presunto delito contra la ordenación del territorio tipificado por el artículo 319 del Código Penal, solicitando como primera medida urgente la paralización cautelar e inmediata de las obras.
Estas nuevas denuncias contra Suliar ponen en una grave situación a esta empresa precisamente en un momento en el que comenzaba a verse la posibilidad de legalización de su actividad en sa Roca Rotja, para la que tienen licencia provisional pero que fue precintada por una denuncia de los vecinos. Desde el primer momento en que se inició la problemática de Suliar se va a relacionar con la falta de alternativas para ésta y otras empresas que se encuentran en la misma situación. Una vez paralizado el proyecto del polígono de Son Puça, se han multiplicado las denuncias contra las empresas ubicadas en suelo rústico.