El Servicio de Protección de la Naturaleza (Seprona) de la Guardia Civil investiga las actividades que se realizan en el vertedero de Son Fortè de Artà, clausurado a mediados de año, a raíz de la denuncia formulada por Julen Adrián, portavoz del grupo EU-EV, quien manifiesta que el pasado jueves a las 16.30 horas, constató «cómo dos camiones vertían restos de obras o excavaciones».
Adrián explica que «había un encargado provisto de albaranes que llevaba el registro de los camiones y el gerente de Triatge 2000, informó que tenían permiso para restaurar la cantera». «No creo que restaurar la cantera comporte mantener el negocio del vertedero que está ubicado en una zona ARIP (Àrea Rural de Interés Paisajístico) y está protegida por la Ley de Espacios Naturales», agregó. Adrián solicitó al Ajuntament que «se vuelva a precintar la cantera de Son Fortè y se abra un expediente de infracción, así como vigilar la clausura».
A raíz de esta denuncia, miembros del Seprona se personaron anteayer por la mañana en Son Fortè para comprobar los hechos y «a partir de ahora, conjuntamente con la Policía Local, llevará una intensa vigilancia para que no se realicen vertidos», explicó Josep Silva, primer teniente de alcalde en el Ajuntament d'Artà.
Miquel Alzina, gerente de Triatge 2000, empresa que gestiona la cantera de Son Fortè, ha explicado a Ultima Hora : «Disponemos de la autorización de la Conselleria de Medi Ambient para regenerar la cantera y sólo se ha depositado material inerte». El alcalde, Montserrat Santandreu, dice: «La empresa no podía realizar los vertidos sin presentar la autorización del Govern, documento que se me dará el lunes para poder continuar con la actividad».