Los ayuntamientos dispondrán de 2.000 millones de pesetas para ejecutar con más rapidez obras en sus carreteras. A partir del próximo año, las corporaciones locales podrán optar a la nueva línea de ayudas que ha habilitado el Govern de les Illes Balears para los próximos diez años.
Los ayuntamientos presentarán el proyecto y si cuentan con el beneplácito de la Conselleria d'Obres Públiques, podrán adjudicar las obras, aunque deberán adelantar el importe de la actuación vial. En un periodo de 10 años, al igual que está haciendo con los centros de salud, el Govern pagará íntegramente el coste de la obra. Ahora bien, los intereses correrán a cargo de los ayuntamientos si se han visto obligados a suscribir un préstamo.
Rondas y mejoras de las travesías son las obras más reivindicadas por los consistorios. «El objetivo es ayudar a los ayuntamientos con el tráfico de paso por sus municipios. Muchas rondas urbanas se han realizado sin justificación dentro de la red viaria, pero permiten descargar el tráfico sin hacer urgente la ejecución de una variante. Son obras que en cierta manera paliarán la falta de variantes», explica Joan Cifre, jefe del Departament de Carreteres.
Esta iniciativa ha optenido una importantes respuesta por parte de los ayuntamientos de Mallorca. Sa Pobla, Santanyí, Manacor, Algaida, Campanet o Petra, entre otros, ya han mostrado su interés por llevar a cabo obras en las carreteras que atraviesan sus municipios. El ex conseller Josep Antoni Ferrer creó esta línea que mantendrá Francesc Quetglas, nuevo titular de Obres Públiques, si bien quiere que los proyectos de las administraciones locales se ajusten a criterios estrictamente viarios y no urbanísticos.