«El problema es que si no hay red de aguas residuales no pueden abrir un restaurante, dos tiendas ni acabar los apartamentos», explicó una de las vecinas de ses Covetes en la reunión celebrada ayer en la que se reactivó la antigua asociación de vecinos de la zona costera con el objetivo de integrarla a la plataforma contraria al paseo, que estará integrada también por UM y, previsiblemente, por el PSOE.
Los vecinos afirmaron que el alcalde Prohens «no puede venirnos con cuentos y chantajes de que si no se hace el paseo no puede dotar a ses Covetes de red de saneamiento». En este sentido, advirtieron que «es su obligación construir la red de aguas residuales y es obligación del Govern pagar la conducción hasta una depuradora porque para ello ya se paga un canon de saneamiento».
En la reunión, a la que asistieron unos 70 vecinos, se acordó «no aceptar consensuar una actuación», (tal y como se hizo en la Colònia de Sant Jordi). «En ses Covetes nos oponemos totalmente al proyecto y no queremos que se haga nada», explicó el portavoz de UM, Joan Josep Mas, quien añadió que en esta zona de la costa «existe un paseo marítimo natural por el que puede acceder gente mayor y también los minusválidos» .
Los vecinos tenían ayer 150 firmas contra el paseo de todos los vecinos de la primera línea de ses Covetes y parte de la segunda, y tienen previsto colgar pancartas reivindicativas en sus casas.