El equipo de gobierno, formado por los grupos Convergencia Democrática Murera (CDM) y el Partido Popular (PP), discrepó en el último pleno celebrado en Muro en cuanto a la realización de la obras de mejora en el polígono industrial de Marjals II. Así, el PP votó a favor de la ejecución de las obras, mientras CDM lo hizo en contra. El teniente de alcalde del Ajuntament de Muro, Nofre Plomer (PP), manifestó que «votamos en contra de las obras porque a estas altura ya existe una partida económica destinada a las obras del Pla Mirall que deben de realizarse en el polígono y porque ya se ha comunicado a los afectados que deberán de pagar una serie de contribuciones especiales y la mayoría de estos están de acuerdo».
El teniente de alcalde también explicó que «si las obras no se realizan ahora, corremos el peligro de que, más adelante, entre otra moratoria que prohiba la edificación en la zona». Estos motivos también fueron los esgrimidos por los representantes de Unió Mallorquina (UM) en el Ajuntament, que también votaron a favor de la ejecución de la obras. El portavoz de UM en Muro, Jaume Perelló, explicó que «si no se realizan las obras, el Ajuntament perderá la subvención del Pla Mirall».
CDM, socio del PP en el equipo de gobierno, votó, por su parte, en contra de las obras porque, según informó Plomer, «el alcalde Miquel Ramis (CDM) es partidario de realizar las obras más adelante para no endeudar al Ajuntament y para que no tengamos que ir justos de dinero». Por otra parte, en el pleno se respondió a la pregunta de UM sobre cuál es el destino final del agua depurada de nitratos. Plomer y el regidor del PSM, Pau Mateu, explicaron que los nitratos son eliminados totalmente en la depuradora municipal, sin suponer por tanto peligro para los pozos de los alrededores.