Un fuerte relámpago destruyó ayer parte de una escultura de Sant Damià que está situada en la parte alta de la iglesia de Pina, núcleo del término municipal de Algaida. El golpe fue tan impactante que arrancó la cabeza del cuerpo, aunque curiosamente, al caer ésta al suelo no se rompió. Los hechos ocurrieron sobre las 16 horas cuando se produjo una intensa tormenta en la población. Da la casualidad que, hace unos 26 años, un relámpago también destrozo la escultura de Sant Cosme que se encuentra al lado del campanario de la iglesia.
Algunos ciudadanos apuntaron que la cruz, situada justo en medio de los dos personajes, también sufrió las consecuencias de un relámpago hace ya muchos años. La cabeza del santo no se rompió. Sin embargo, sufrió graves golpes. La indumentaria de piedra también se resintió violentamente. La plaza, calles y algunas casas, recibieron el impacto de la piedra, hecho que alarmó a los vecinos de la zona.
Los primeros en contemplar la cabeza de Sant Damià en el suelo fueron los jóvenes Pep Lluís Busquets, Xisco Bibiloni, Toni Busquets y Bernat Puigserver. Agentes de la Policía Local de Algaida y los bomberos acudieron al lugar del incidente y observaron cómo unas piedras quedaron sobre el campanario, a punto de caer, así como las grietas de un pequeño balcón se habían ampliado.
Por otra parte, los litros caídos por metro cúbico en tan sólo una hora sobre las localidades de Algaida y Pina, inundaron varias viviendas del casco urbano de Algaida. Fueron muchos los vecinos que pidieron auxilio a la Policía Local durante el día de ayer. Asimismo, un relámpago cayó sobre una casa, provocando una avería eléctrica.