Desafiando las alturas, ayer por la mañana once músicos despertaron y llamaron a la fiesta a los vecinos de Sant Joan, pueblo que festejó, en su día grande, el martirio del santo patrón. Desde el campanario, el sonido de las xeremies, flabiols i tamborinos, ambientó de tradición y autenticidad la villa de es Pla, sumergida en una jornada de familiaridad, diversión y mucha calor.
Subiendo por unas antiquísimas escaleras de madera y otras de metal, combatiendo el vértigo, alcanzaron la «cima». Los protagonistas de la actuación fueron: Guillem Company, Mateu Gayà, Rafel Bauçà, Margalida de Son Carrió, Jordi Gayà, Andreu Galmés, Xavier Gayà, Andrea Virgili, Miquel Soler y Rafel Roig "el más joven de 8 años". El grupo estuvo dirigido por Joan Morey. A las 11 comenzó la misa, concelebrada por doce capellanes . El coro parroquial y el baile de l'Oferta centraron el acto principal de las fiestas patronales.