Los socialistas de Pollença celebraron con una fiesta multitudinaria una década de gobierno de su partido en el Ajuntament de Pollença. Los principales protagonistas fueron el ex alcalde Miquel Oliver, que ostentó la alcaldía desde 1991 a 1999; y la actual alcaldesa, Francisca Ramón, que cogió el relevo de Oliver. Los dos recordaron los progresos de Pollença en estos diez años de socialismo.
El acto festivo contó también con la presencia de Francesc Antich, secretario general del PSIB-PSOE y president del Govern de les Illes Balears; Micaela Navarro, secretaria de Igualdad del PSOE Madrid; y Eric Campos, secretario de Madrid de las Juventudes Socialistas.
Antich quiso dar su apoyo incondicional a los socialistas de Pollença y agradecer a Miquel Oliver y Francisca Ramón su dedicación al proyecto socialista, un proyecto, según dijo «con igualdad de oportunidades para todos». El presidente habló de solidaridad asegurando que «gobernar con solidaridad quiere decir también ser solidarios con el territorio y no enterrar nuestro patrimonio bajo el cemento».
En declaraciones a Ultima Hora y refiriéndose a la crisis que el PSOE protagoniza en varios municipios, dijo que «en todas las legislaturas nos encontramos con problemas que tenemos que ir solucionando. En el caso de Manacor, estamos trabajando para poder reincorporar nuevamente al pacto de gobierno municipal; y en el caso de Alcúdia es una crisis interna que no afecta para nada a la gobernabilidad ni al pacto que tenemos con UM».