El Ajuntament d'Artà tiene la intención de fijar la velocidad máxima de todo tipo de vehículos en las zonas residenciales de los casco urbanos de Artà y la Colònia de Sant Pere, a 15 kilómetros hora. El objetivo de esta medida es recuperar la habitabilidad de las calles. Para ello, la pacificación del tráfico es uno de los principales objetivos. Fijar la velocidad máxima en 15 kilómetros hora, una reducción que está en función del ritmo de los peatones, representa una medida pionera en todo el estado y, de momento, sólo se aplica en algunos países de la Unión Europea donde se aplican políticas encaminadas a la movilidad sostenible y al tráfico tranquilo.
En este sentido, el Ajuntament d'Artà solicitará a la Direcció General de Mobilitat del Govern balear la redacción de un plan piloto de moderación del tráfico, aprovechando que las obras previstas para la remodelación de la red de agua, fibra óptica y gas, obligarán a levantar el pavimento de las calles y «sería una oportunidad excepcional poder implantar el plan de moderación del tráfico», según el Ajuntament. De igual manera, la implantación del plan de moderación de tráfico, también supondrá la transformación del actual entramado vial, en el que tendrán prioridad los peatones, las bicicletas, el transporte público y prevé la reducción del uso de los medios de transporte más agresivos, como por ejemplo, los vehículos privados.