El ministro de Medio Ambiente, Jaume Matas, que se desplazó ayer a Palma para visitar la desaladora con parlamentarios aragoneses, afirmó que el proyecto de paseo marítimo en la Colònia de Sant Jordi «entra dentro del ámbito competencial del Ministerio», aunque preciso que «hay que analizar en profundidad esta sentencia». Matas se refería de esta forma al dictamen del Tribunal Supremo que otorga al Govern de les Illes Balears plenas competencias en ordenación del litoral. Sobre este proyecto, en concreto, la Conselleria de Medi Ambient informó desfavorablemente.
Las reacciones a la decisión del Supremo entre los políticos locales, asociaciones ecologistas y plataformas tanto favorables como contrarias al proyecto no se han hecho esperar. Aunque desde el GOB celebraron la sentencia del Supremo, Miquel Àngel March, manifestó que «el Ministerio seguirá presionando por lo que hay que seguir trabajando y promoviendo movilizaciones y campañas de información».
En el seno del equipo de gobierno (UM-PP) del Ajuntament de ses Salines aceptaron la noticia con resignación. El alcalde Antoni Caldentey (UM), que hace apenas un mes manifestó que haría «todo lo posible» para que se ejecutara el proyecto, explicó ayer que «respeto la Justicia y las instituciones y, en este caso, no comparto pero aceptaré lo que decida la Conselleria de Medi Ambient; no entraré en polémicas ni discusiones» y concluyó: «Hemos perdido el proyecto».
El teniente de alcalde, Joan Burguera (PP), que el 30 de este mes pasará a ser alcalde en virtud del pacto con UM, comentó que «es un asunto de competencias en el que no voy a entrar; ellos decidirán si se hace o no el paseo». En cualquier caso, Caldentey y Burguera estarían dispuestos a dialogar para llegar a un acuerdo entre Ajuntament, Ministerio y Conselleria para que se realice una actuación consensuada en el litoral de la Colònia de Sant Jordi. Por su parte, el portavoz del PSOE, Antoni Perelló, explicó que «ahora es el momento de poner sobre la mesa y debatir entre todas las instituciones el proyecto que nosotros confeccionamos hace cinco años cuando estábamos en el equipo de gobierno, que costaba la mitad de lo que vale la monstruosidad que quieren hacer ahora».