Villalonga ha explicado que en el complejo de Pula se han contabilizado hasta 30 irregularidades. Por su parte, fuentes de la empresa aseguran que han contestado en forma de alegaciones, que esperan la contestación y que existe la firme voluntad de solucionar todos los problemas.
El edil de Urbanismo explicó que todo el proceso administrativo y urbanístico fue correcto hasta mayo de 1995, «la promotora presentó un proyecto de ejecución que no se ajusta a la licencia concedida sobre el proyecto básico, el Ajuntament pide que rectifique y en noviembre se le concede la prórroga. Cuando realiza la obra lo hace sobre el proyecto de ejecución cuando la licencia era sobre el proyecto básico».
Villalonga dice que la irregularidad es que «el proyecto de ejecución se presentó sobre una parcela que no era la misma del proyecto básico, aunque entonces toleró». El 30 de junio de 1999, la promotora solicita el final de obra del Club Social y la caseta de palos, el Ajuntament contesta que no se puede conceder porque las construcciones no están terminadas y no se ajustan a la licencia.
Villalonga enumera otras irregularidades: tres pasos subterráneos por la carretera cuando sólo cuentan el permiso del Govern de les Illes Balears, no protegen el talaiot ni la franja viaria y que el complejo de agroturismo no tiene licencia para tal actividad».
La dirección de Pula Golf manifestó, al respecto, que el pasado 2 de junio remitió al Ayuntamiento de Son Servera un pliego en el que se contestan las irregularidades que denuncia Urbanismo.