La ronda desviará el tráfico por las afueras de Son Servera y estará en funcionamiento cuando ya han pasado tres años desde que comenzaron las obras. Con la apertura de esta nueva vía de circunvalación, los conductores que hagan el trayecto hacia o desde Cala Rajada y quieran conectar con la carretera de Palma evitarán tener que introducirse en las calles del casco urbano de Son Servera y, de esta manera, se evitarán retenciones. Las obras estuvieron un año paralizadas porque la Direcció General d'Obres Públiques del Govern tuvo que realizar una serie de modificaciones en el proyecto inicial para atender las peticiones del Ajuntament serverí.
Ahora, los conductores podrán recorrer un kilómetro y medio que mejorará la accesabilidad a muchos lugares de la comarca de Llevant. El director general d'Obres Públiques, Joaquín Rodriguez, explicó que «la nueva vía de circunvalación tiene su punto de partida en es Pont d'en Calet, justo a la entrada habitual a Son Servera, y a partir de este punto sale un desvío que se proyecta hacia el exterior del pueblo». Además, el director general hizo hincapié en la «peculiaridad de la vía, en la medida que se han construido tres rotondas con distintas intersecciones a lo largo de todo el tramo».
Según Rodríguez, «este sistema de rotondas abiertas y cerradas garantiza una circulación mucho más fluida y sobre todo, mucha más seguridad en la prevención de accidentes». La nueva vía está presupuestada en unos 190 millones de pesetas y en estos momentos se están ejecutando las obras de pavimentación e iluminación. La tardanza en la ejecución de estas obras ha sido muy criticada por los vecinos de Son Servera por las molestias que ha ocasionado.