La estación depuradora de Muro vierte desde hace días aguas residuales depuradas en una propiedad privada incluida en un Àrea Natural de Especial Interés (ANEI) cercana al Parc Natural de s'Albufera. El Servei de Protecció de la Natura (Seprona) de la Guardia Civil inició ayer una investigación de lo ocurrido en la depuradora. Los técnicos se desplazaron al lugar a raíz de la denuncia de un vecino afectado por los vertidos.
El denunciante, Joaquín Cirera, denunció el viernes pasado el vertido continuo de aguas en el lugar donde habitualmente pastan sus ovejas. Según Cirera, «hace más de dos semanas que se vierte agua procedente de la depuradora en la zona». La estación depuradora fue construida en la zona antes de que fuera declarada ANEI, y tiene un sistema de evacuación de agua por infiltración. Actualmente, el agua es conducida a través de unos seis kilómetros de tuberías hasta un pozo de infiltración ubicado en la zona de Son Real, en el término municipal de Santa Margalida.
Los técnicos de Seprona sospechan que el problema que causa los vertidos radica en que, por motivos que se desconocen, el agua no tienen fuerza suficiente para llegar al pozo de infiltración de Son Real. «El origen de los escapes de agua podrían deberse a la rotura de alguna de las bombas que envían el agua a Son Real», mantuvo también el gerente del Institut Balear de Sanejament (Ibasan), Joan Mateu Horrach.