Las críticas al discurso del rey Juan Carlos y a las declaraciones del presidente del Gobierno central, José María Aznar, fueron la tónica dominante del acto de inauguración del Acampallengua 2001, organizada por Joves de Mallorca per la Llengua que se celebra en Felanitx durante todo el fin de semana. «Cabe decir y recordar a estos ignorantes que todavía hoy se nos impone el castellano. Estas personas no saben nada sobre lo que supone y son los Països Catalans. Debemos exigir que se respete nuestra lengua», manifestó ayer la vicepresidenta del Consell de Mallorca, Maria Antònia Vadell.
Francesc Antich, presidente del Govern, en su discurso de presentación de la jornada, siguió en la misma línea de crítica de Vadell. «Los que gobiernan el Estado en estos momentos nos amenazan porque no quieren que usemos nuestra lengua en todas las actividades que llevamos a cabo en la Comunitat balear. No creen y no quieren entender que este Estado es plural y tiene diferentes culturas».
El presidente del Govern insistió en decir que «de todas formas, aunque las declaraciones y amenazas que se han hecho contra nuestra lengua, debemos ser optimistas porque por primera vez en 300 años tenemos la posibilidad de avanzar y trabajar para nuestra lengua. Nuestra Comunitat debe ser libre, tener y conservar su propia cultura y tradiciones fuera de la uniformidad que nos quieren imponer los demás».
Pere Sampol, vicepresidente del Govern balear y conseller d'Economia, Comerç i Indústria, hizo referencia a la nueva ley de comercio impulsada por el Ejecutivo balear: «Si no nos la aprueban, pondremos un recurso ante el Tribunal Constitucional y si nos exigen dos niveles de lengua por la ley, nosotros vamos a promover la reforma de la Constitución en este sentido».