El portavoz municipal del PSOE, Ramon Socias, comentó ayer a este periódico que el equipo de gobierno ha abierto un periodo de reflexión a la espera de que el concejal de Els Verds en las filas socialistas, Onofre Bisbal, «tenga tiempo de estudiar en profundidad» el expediente sobre la posible construcción de un polígono de servicios en Son Puça y reconsidere su actual oposición a esta iniciativa. No obstante, la crisis de gobierno sigue latente y prueba de ello es que la Comisión de Gobierno celebrada ayer se prolongó durante mucho más tiempo del habitual.
Socias, quien advirtió que durante este periodo no se realizarán manifestaciones públicas, asegura que el «pacto va bien» pese a las discrepancias surgidas en su grupo por parte de Bisbal respecto al polígono industrial y agregó que «no es la intención de Bisbal que se pueda romper el pacto de gobierno». Bisbal ha decidido respetar el «pacto de silencio» impuesto por tras el pleno celebrado anteanoche y tras haber concertado una entrevista con este periódico, ayer por la mañana señaló que no podía realizar declaraciones al respecto hasta una nueva fecha.
Por su parte, el alcalde, Joan Arbona (PSM), también se mostró ayer muy cauto al pronunciarse sobre el futuro de Son Puça y se limitó a decir que este punto del pacto de gobernabilidad sigue en suspenso hasta que Onofre Bisbal se pronuncie definitivamente al respecto. El batle indicó que no hará más manifestaciones hasta que el edil independiente diga cuál es su postura final.
Los vecinos que tienen sus viviendas cerca de la empresa Suliar comentaron a Ultima Hora que seguirán reivindicando su derecho a vivir tranquilamente y sin padecer las molestias provocadas por unas industrias que legalmente no pueden estar ubicadas en el suelo rústico del municipio.