Francesc Antich, presidente del Govern, expresó ayer su apoyo a la iniciativa del Ajuntament de Marratxí de desclasificar 50'06 hectáreas de es Caülls para evitar su urbanización. Antich, que visitó los terrenos protegidos acompañado por el alcalde Miquel Bestard y un nutrido grupo de regidores, destacó las medidas que últimamente ha adoptado el Consistorio para poner fin a un crecimiento no sostenible.
«Marratxí recibía una presión urbanística brutal, pero en la última revisión del Plan General de Ordenación Urbana (PGOU) ya redujo el techo poblacional a la mitad y aumentó las zonas verdes. Además, está liberando al municipio de urbanizaciones con desclasificaciones como ésta», indicó Antich. El presidente del Govern animó a los ayuntamientos de la Isla a seguir el ejemplo de Calvià y Marratxí, que «han asumido el coste de todo tipo» para apostar por un crecimiento sostenible y defender el paisaje que «es el principal tesoro de la Comunitat». Reconoció que siempre existe el peligro de que los tribunales declaren que a favor del pago de indemnizaciones, «pero las instituciones estamos abiertas a lo que nos digan. De cualquier forma, en las últimas sentencias se da la razón a las instituciones que han optado por desclasificar».
El alcalde Miquel Bestard se manifestó satisfecho, ya que la decisión de desclasificar es Caülls se tomó por unanimidad de todos los grupos políticos. No obstante, reconoció la presión que va a recibir por parte de los promotores urbanísticos. De hecho, la promotora ya ha presentado alegaciones a la declasificación como paso previo a la interposición de un recurso. Miquel Bestard confía en pagar sólo la redacción del proyecto.