Las tres construcciones que se encuentran en la finca de Albarca, la caseta de s'Arenalet des Verger y la caseta dels Oguers, podrán ser rehabilitadas de los beneficios que se obtengan con la imposición de la ecotasa. De esta manera se recuperará un valioso patrimonio de carácter arquitectónico al mismo tiempo que se destinará como casas de refugio para los excursionistas.
Una de las novedades que señaló la consellera Margalida Rosselló durante la presentación del documento sobre el Plan de Gestión fue la declaración de refugio de caza de las fincas y señaló que en el transcurso del primer año en que el Govern adquirió estos terrenos se han llevado a cabo muchas actividades que han servido como experiencia piloto para poder elaborar el Plan de Gestión.
La Conselleria d'Agricultura i Pesca y la de Turisme, el Ajuntament d'Artà y la Direcció General de Patrimoni han contribuido en las labores realizadas, que pasan por la señalización de los caminos que conducen a las fincas, se ha aumentado la vigilancia y llevado a cabo las tareas de mantenimiento a través del Ibanat.
La educación ambiental y las actuaciones de carácter agrícola y ganadero también han sido fomentadas por la Administración y se ha poblado la zona con vacas mallorquinas procedentes de s'Albufera. El plan contempla también fomentar la realización de estudios de investigación mediante convenios de colaboración.