El Ajuntament d'Alcúdia ha abierto un expediente de infracción urbanística contra el alcalde de Inca, Pere Rotger, por construir una piscina sin licencia en este término municipal.
La piscina está situada en un chalet propiedad de Rotger en la conocida urbanización de Bonaire, en la bahía de Pollença. Rotger informó ayer de que «ha sido un gabinete de arquitectos el que ha gestionado todo el papeleo. La piscina está construida desde hace un año y pagué las tasas para hacerla en el Ajuntament, por lo que la noticia me ha cogido por sorpresa».
Fuentes del Consistorio de Alcúdia han informado de que el alcalde Rotger solicitó permiso para construir la piscina hace más de un año. El Ajuntament alcudienc notificó al alcalde que existían una serie de deficiencias en el proyecto que debía subsanar, pero Pere Rotger no se volvió a poner en contacto con el Consistorio.
Rotger da una versión diferente. Explica que «los técnicos del
Ajuntament d'Alcúdia nos dijeron que podíamos empezar la obra
porque la piscina no se considera como un edificable y yo me olvidé
del tema. Lo que pasa es que ahora me han notificado que mi chalet
excede en 10 metros cuadrados el volumen permitido y por eso no me
conceden el permiso para la piscina. Se trata de un porche que
cerré con una pared hace 18 años y ahora tendré que derribarla». En
opinión de Pere Rotger, «se trata de una maniobra política y no
deja de ser ridículo que por un porche se arme todo este
revuelo».