«El PP ha querido capitalizar la cuestión de la desaladora de Alcúdia politizando un problema que no existe, creo que no es muy leal querer politizar algo que hasta ahora se ha consensuado». Así se expresaba el alcalde de Alcúdia, Miquel Ferrer, refiriéndose a la moción, sobre la desaladora presentada la semana pasada en el Parlament por Jaume Font, alcalde de sa Pobla.
Ferrer explica que «el president del Govern y los alcaldes de la Mancomunitat del Nord han mantenido entrevistas con el ministro Matas en Madrid y nunca se ha puesto ninguna objeción a la construcción de la desaladora y es de esperar que siga el consenso».
«Me preocupa y debería preocupar al PP», dice Ferrer, «que la desaladora es una solución a medio plazo y lo que necesitamos son soluciones a corto plazo. De momento, la realidad es que el ministro Matas no nos da soluciones inmediatas».
Refiriéndose al problema de la falta de arena de las playas de Muro y Can Picafort, Ferrer indicó: «Es injusto que nos acusen de insolidarios porque nos oponemos al trasvase de la arena de Alcúdia hacia las zonas costeras colindantes, ya que este trasvase no nos preocupa por el perjuicio a nuestro municipio sino porque es perjudicial para el ecosistema en general». «Hay que dar soluciones pero las soluciones de unos no pueden perjudicar a otros», añadió el batle.