Las autoridades locales y autonómicas inauguraron ayer la Fira de la Tardor de Porreres comiendo frito y chuletas de cordero en compañía de los ganaderos del municipio.
La comida tuvo lugar en el emblemático Parc de n'Hereveta donde asistieron la presidenta del Consell de Mallorca, Maria Antònia Munar; el vicepresidente del CIM, Antoni Pascual; el conseller d'Agricultura i Pesca del Govern balear, Mateu Morro, y diputados del Partido Popular. También estuvieron todos los miembros de la corporación local presidida por el alcalde de Porreres, Joan Sastre (UM).
Con esta actuación, las autoridades locales y autonómicas quisieron solidarizarse con los ganaderos que comercializan con el cordero e incentivar el consumo de este producto, que se ha visto afectado por la «lengua azul».
Una de las principales novedades que ofreció la Fira de la Tardor de Porreres fue que la Mostra de Productes Locals se ubicó en la Plaça de la Vila en lugar de l'Excorxador donde se celebraba en los años anteriores. El objetivo es, según el alcalde Joan Sastre, «revitalizar el centro comercial». También se ubicó otra parte de esta muestra en la plaza de la iglesia donde se pudieron contemplar desde comestibles como galletas, sobrasadas, patés y ensaimadas, hasta muebles y textiles.
Este año, la Fira contó con un total de 200 expositores y una mayor extensión de la Fira que ocupaba casi la mitad del pueblo.