El vicepresidente del Govern, Pere Sampol, se comprometió ayer con la Plataforma en Defensa del Medio Ambiente del Raiguer a realizar un análisis de la tierra y el agua de la zona próxima a la fábrica de cemento de Lloseta, durante su visita a Binissalem.
La intención de Sampol es reunirse en quince días con los representantes de la plataforma para discutir sus propuestas. Ayer, los afectados entregaron al vicepresidente un dossier con los análisis que han realizado y los tipos de contaminación que padecen.
Bernat Fiol, representante de la plataforma, ha advertido que tiene conocimiento de la entrada en el Ajuntament de Lloseta de un proyecto de ampliación de la planta de cemento. Este hecho, según Fiol, contaminaría más la zona. Además, la plataforma ha comprobado que sale más barato importar cemento de la Península, ya que es de mejor calidad que el que se hace en Lloseta, que tiene mezcladas cenizas procedentes de Son Reus que pueden estar contaminadas.
Pere Sampol visitó Binissalem para comprobar in situ el proyecto de peatonalización de la calle de es Born y parte de un lateral de la plaza de la iglesia para fomentar el crecimiento del tejido comercial. El proyecto asciende a unos 23 millones de pesetas.
Por su parte, el alcalde Salvador Cánoves ha destacado que una vez que se lleva adelante el plan de peatonalización se habilitarán para aparcamiento una zona de la escuela graduada con algo más de 40 plazas y 8.000 metros cerca del futuro instituto.