Han pasado ya diecisiete años desde que los jóvenes cristianos de Mallorca acudieran en masa al santuario para celebrar el centenario de la coronación de la Virgen de Lluc. Desde entonces, el encuentro anual ha sido una cita ineludible. La Vetlla está considerada como una ocasión única para que los jóvenes de entre 18 y 30 años aprendan a descubrir la presencia de Dios. A partir de esa idea básica, la delegación diocesana de Joves d'Església organiza año tras año este encuentro, en esta ocasión bajo el lema «Estic amb tu».
A partir de las cuatro de la tarde de ayer, los participantes fueron llegando al monasterio. Chicos y chicas procedentes de todos los pueblos de Mallorca instalaron cuidadosamente sus tiendas de campaña en el recinto adjunto y se procedió al reparto de material para participar en las actividades que se desarrollaron durante toda la tarde. En función de la edad de los participantes, el programa de actividades variaba desde los juegos hasta el intercambio de experiencias o las charlas-coloquio. A las diez de la noche, una vez concluida la cena, el vicario general, monseñor Andreu Genovart, celebró una plegaria.
La participación popular en la Vetlla se mantiene año tras año en torno a las 800 personas. Todos ellos participan de unas jornadas cristianas, pero también juveniles donde no falta la diversión. Son muchos los que aprovechan una buena ocasión para dormir al aire libre.