El Ajuntament de Santanyí ha comenzado una campaña para ahorrar agua. Para ello repartirá 1.000 bolsas de agua que los particulares colocarán en sus respectivos depósitos de los inodoros. Con ello, se pretenden ahorrar unos 18.000 litros de agua cada día. El sistema consiste en que el volumen de agua que ocupa la bolsa en el depósito no sale cuando se tira de la cadena.
A pesar de esto, hay que tener en cuenta que el término municipal de Santanyí cuenta con 40.000 plazas hoteleras, por lo que la medida parece insuficiente. Es más, si se repartieran 20.000 bolsas se conseguiría un ahorro de 360.000 litros de agua diarios. El alcalde de Santanyí, Miquel Vidal (PP), ha explicado que «no repartimos bolsas por los hoteles porque no es una campaña turística sino medioambiental; la hacemos para la gente que vive en el pueblo durante todo el año, durante el invierno las plazas hoteleras están desocupadas».
Vidal quiere dejar claro que esta campaña es simbólica y que «es más de sensibilización que de ahorro de agua, compraremos más bolsas en función de la demanda», concluye el primer edil.