Ayer por la mañana transitar por la carretera de Inca a Alcúdia se convirtió en un auténtico suplicio para los conductores por las retenciones de varios kilómetros que se produjeron. Estos atascos se produjeron por las obras de construcción de una rotonda a la altura del cruce entre Búger y Campanet.
La empresa concesionaria de este proyecto se vio obligada a cerrar un carril durante unas horas para poder abrir una acequia para pasar las tuberías de los servicios de agua y teléfono, entre otros. Los operarios dieron paso alternativamente a los coches que venían en cada sentido, pero no pudieron evitar las largas retenciones que se produjeron. La constructora de las obras calcula que se producirán cortes alternativos sólo un día más.
A pesar de todo, la constructora ha pedido disculpas a los conductores por las posibles molestias que haya ocasionado, pero también dice que los cortes de tráfico han sido realmente necesarios para proseguir la obra. A parte de la dotación de servicios, en estos momentos también se nivela el terreno para los viales laterales de acceso. Más tarde se empezará la rotonda.