El Ajuntament d'Alcúdia está dispuesto a abrir al público la cueva submarina de Las Lágrimas para promocionar el turismo activo en el municipio. El alcalde Miquel Ferrer indicó ayer a Ultima Hora que «la cueva es, según la ley, de propiedad municipal, aunque son un grupo de buceadores los que han levantado un acta notarial para certificar la existencia de la misma y, por lo tanto, tienen unas preferencias legales que deberemos respetar cuando se conceda la explotación».
Según la ley, el Ajuntament debe sacar a concurso la explotación de esta cueva que es de propiedad municipal y, por lo tanto, patrimonio de la localidad. Los descubridores, en este caso los buceadores que han levantado el acta notarial, podrán adjudicarse la explotación con un 10 por ciento de rebaja en relación a las demás ofertas. Según Ferrer, el Ajuntament está dispuesto a autorizar la explotación, siempre y cuando no se masifiquen las visitas ni se realicen obras y reservándose la exclusividad de promoción para el turismo activo del municipio, pudiendo utilizar las imágenes de la cueva en sus catálogos de promoción turística.
La cueva de Las Lágrimas es una gruta submarina, por lo que las visitas turísticas sólo serán accesibles a aquellas personas amantes del submarinismo. Los espeólogos de la empresa están realizando la cartografía de la cueva y el concejal de Patrimonio, Miquel LLompart, tiene previsto sumergirse el próximo sábado para visitarla y valorar «in situ» sus posibilidades.