El fuerte calor ha provocado un pequeño adelanto en la época de la vendimia. Las variedades foráneas han madurado rápidamente por lo que las bodegas Franja Roja de Binissalem comenzaron ayer a recoger los primeros frutos. La vendimia continuará durante los próximos días aunque hoy y mañana se recolectarán exclusivamente las variedades foráneas Cabernet-Sauvignon y Tempranillo, utilizadas habitualmente para enriquecer los caldos autóctonos.
Esta misma semana se unirán a la recogida el resto de bodegas de la denominación de origen Binissalem, en esta ocasión para recolectar la variedad Manto Negro, la mayoritaria en la comarca. No será hasta la semana próxima cuando la vendimia se centre en la variedad Moll, también conocida como Prensal Blanc. Aunque la sequía ha castigado duramente la cosecha, cuyo rendimiento por hectárea ha decrecido un 15 por ciento, este hecho no repercutirá en el volumen global de la cosecha que se estima en 1.700 toneladas. Este año se había incrementado notablemente el número de hectáreas cultivadas, lo que ha permitido reducir las pérdidas.
La recogida manual sigue siendo el método habitual en la vendimia aunque las bodegas Franja Roja utilizarán este año maquinaria especializada en la mitad de su cosecha. Las máquinas fueron probadas con éxito durante la pasada campaña y este año funcionarán con una media de seis horas de trabajo diarias. Los veremadors trabajan mañana y tarde y cesan en su trabajo al caer la oscuridad mientras que la máquina aprovecha las bajas temperaturas de la noche para desarrollar su trabajo, garantizando así una mejor conservación de la uva en su traslado hasta los cellers.