Una polémica disputa por ocupar los primeros bancos en la iglesia parroquial durante el homenaje a la tercera edad acabó con una pelea vecinal y una denuncia por agresión contra el alcalde, Joan Jaume.
Dentro del programa de actos del pasado domingo estaba prevista la actuación de una veintena de niños de una agrupación de ball de bot. Al parecer, en aquel momento la monitora de estos niños pidió a los organizadores del acto que por comodidad los niños se sentasen en los bancos de las primeras filas del templo. La organización respondió que estos bancos estaban reservados a las autoridades, que debían presidir el acto, por lo que no era correcto ocuparlos.
Esta circunstancia desató una discusión que pasó de los insultos hasta forcejeos y arañazos. Testigos presenciales dicen que incluso una de las monjas presentes recibió algún golpe en esta pelea. Uno de los presentes salió hasta la plaza para buscar ayuda y se encontró de forma casual con el alcalde, Joan Jaume, que accedió a interceder. Por lo que se comenta en el pueblo, el batle trató de convencer por las buenas a la joven sin poder conseguirlo e incluso recibió algunos arañazos. Jaume sujetó fuertemente a la joven e intentó sacarla del templo. Durante el forcejeo, la monitora cayó al suelo. La joven ha presentado denuncia por agresión contra el batle en el cuartel de la Guardia Civil de Sineu. Joan Jaume ya ha prestado declaración ante la Benemérita.