Algunos vecinos de Montuïri han manifestado su descontento al saber que el Obispado de Mallorca autoriza la instalación de antenas de telefonía móvil en los campanarios de las iglesias. Gabriel Ferrer y Margalida Frau son dos vecinos de la zona donde se han instalado algunas antenas en Montuïri y aseguran que éstas causan graves molestias: «El ruido que estos motores provocan se vuelve insoportable». «En verano, nos vemos obligados a dormir con las ventanas cerradas ya que si están abiertas es imposible conciliar el sueño», añaden.
Gabriel y Margalida han intentado por todos los medios que el Ajuntament de Montuïri les haga caso, han organizado una recogida de firmas, han presentado quejas por escrito varias veces pero aseguran que desde el Consistorio les han hecho poco caso. «El Ajuntament no puso ningún impedimento a las empresas que instalaron las antenas, todo lo contrario. Cuando el año pasado cambió el equipo de gobierno pensamos que se nos escucharía algo más, pero las cosas siguen igual, siempre es mañana», afirma Gabriel.
El problema, según explican Gabriel y Margalida, no se acaba con el ruido o con la estética. «Desde que las antenas están instaladas necesito tomar tranquilizantes para dormir, antes nunca había tenido problema alguno», añade Margalida. No está demostrado que las antenas de telefonía móvil perjudiquen a la salud de quienes viven cerca de ellas, pero Gabriel y Margalida están preocupados por sus hijas. Su principal objetivo ahora es que las antenas que tantas molestias causan sean retiradas.