Si el sábado fueron unas 2.000 las personas que se quedaron «tiradas» en Palma por la huelga indefinida del transporte público colectivo de Calvià y Andratx ayer domingo fueron del orden de las 700 según señalaron a este diario fuentes de Comisiones Obreras (CC OO). La quinta jornada de huelga se vivió sin incidentes importantes y con el enfrentamiento, una vez más, entre trabajadores y empresas a la hora de interpretar los servicios mínimos que se habían pactado el viernes por la noche con la Conselleria de Treball.
A las cinco de la mañana del domingo «nos vimos sorprendidos con que la empresa quería que hicieramos unos servicios mínimos de 10 y 13 horas en contra de lo que se había pactado con la Conselleria». Por ello, los trabajadores decidieron cumplir los servicios mínimos como ellos los interpretaron y con una jornada de ocho horas.
Juan Ortiz, secretario general de Transportes de CC OO, insistió ayer en que la empresa «ha calculado mal los servicios y así si por la mañana había siete autobuses por la tarde sólo hubo dos». Ello originó, según el sindicato, que clientes de Sant Telm, Port d'Andratx, Peguera o Santa Ponça que bajaron por la mañana a Palma no pudieron subir por la tarde por falta de autobuses, por lo que tuvieron que optar por transportes alternativos.
Ortiz manifestó que se ofrecieron a las empresas para planificar estos servicios mínimos para que no se repitiera lo del sábado «pero no quisieron, por lo que la culpa no es de los trabajadores sino de la mala planificación que han hecho».
Hoy, inspección
Hoy está previsto que inspectores de la Direcció General de
Transports acompañen a los conductores para comprobar si las
frecuencias y los horarios para los que tienen la concesión se
ajustan a la realidad.
Ayer, a uno de los autobuses se le rompió el cable del líquido de frenado cuando circulaba por Calvià, en lo que podía haber sido una tragedia si el vehículo hubiera ido por la autopista y lleno de pasajeros. El vehículo, que estaba cumpliendo los servicios mínimos pactados el viernes, volvió a las cocheras y en su lugar salió otro para cumplir esos servicios.