Cerca de 40 personas participaron ayer en el acto de inauguración de la primera capilla de Mallorca dedicada a la religión ortodoxa, ubicada en el Hostal Mayor de Cala Sant Vicenç (Pollença). El acto consistió en la celebración de una divina liturgia, a la que le seguió una conferencia a cargo del vicario general de España.
«Con este acto se ha pretendido dar un carácter oficial a esta iglesia ortodoxa, que está bajo la protección del patriarcado de Serbia», explicó Miquel Mayol, encargado de la parroquia, quien subrayó que capilla tendrá un carácter provisional hasta contar con un local más asequible para crear un templo.
La capilla dependerá de la parroquia de Barcelona, a su vez dependiente del Obispado de Occidente. De hecho, ayer se desplazaron a Mallorca varias autoridades eclesiásticas procedentes de la Ciudad Condal. En la Isla, la comunidad ortodoxa está integrada por numerosas familias mallorquinas, así como por bastantes ciudadanos serbios y rusos.